The Stone Roses

Combinando el hedonismo de las drogas de la cultura rave con los ganchos del pop psicodélico de The Beatles, The Stone Roses llevaron a Manchester a la cresta de la ola a finales de la década de 1980. En sus inicios, el grupo se caracterizaba por una estridente mezcla de new wave y punk, pero fue la introducción de las melodías de la guitarra de John Squire y la hipnótica voz de Ian Brown en el single "Sally Cinnamon" lo que ayudó a definir su nuevo sonido y a cambiar su suerte.

Su álbum de debut homónimo de 1989 se convirtió en un clásico instantáneo, produciendo los himnos definitorios de la época "I Wanna Be Adored", "Waterfall" y "I Am the Resurrection", culminando en un legendario concierto al aire libre en Spike Island, Widnes, ante 30.000 personas. Sin embargo, en la cima de su fama, las largas batallas judiciales les impidieron seguir adelante, y tuvieron que pasar otros cinco años y medio antes de que se publicara finalmente el álbum de continuación, "Second Coming". En su ausencia, el mundo había avanzado y Oasis lideraba una oleada de bandas de brit-pop inspiradas en los logros de los Roses. Como los egos estaban a flor de piel, Squire se marchó sin contemplaciones, antes de que una actuación desastrosa en el Festival de Reading les llevara a tomar caminos separados en 1996.

Las aventuras posteriores a la banda incluyeron The Seahorses para Squire y seis álbumes en solitario para Brown, pero en 2011, después de 15 años separados, se anunció que la banda se reuniría para una serie de conciertos en el Reino Unido. Tocaron en varios festivales, como los de la Isla de Wight, Coachella Valley Music and Arts y el concierto de la campaña Justice for Hillsborough, y en 2013 se estrenó mundialmente en el Trafford Park de Manchester una película que documentaba su ascenso y caída. La banda siguió actuando en festivales del Reino Unido y en 2017 anunció una serie de conciertos en estadios de verano, como el SSE de Belfast, Wembley en Londres y Hampden Park en Glasgow.