Sonny Stitt

Considerado al principio como un Charlie Parker menor, Sonny Stitt se labró una carrera memorable al saxofón con un estilo polémico e inventivo que maduró en una rica comprensión tanto del chisporroteante bebop como de las baladas clásicas. Disfrutaba de los duelos musicales con otros artistas y tenía el don de ser un artista al que le encantaba atraer y agradar al público. A lo largo de docenas de grabaciones, desempeñó un papel fundamental en el desarrollo del jazz moderno y tocó con las principales estrellas de jazz de su época, como Dizzy Gillespie, Thelonious Monk y Miles Davis.

Nacido en Boston, fue dado en adopción por su padre músico y creció en Saginaw, Michigan, con una familia apellidada Stitt. Adoptó el apodo de Sonny y, siendo aún adolescente, tocó con una banda local de swing. Conoció a Charlie Parker a principios de la década de 1940 y ambos destacaron la similitud de sus estilos, lo que ayudó a Stitt a ganarse un puesto en sustitución de Parker en bandas dirigidas por Billy Eckstine y Dizzy Gillespie. Junto con el trompetista Kenny Dorham y el pianista Bud Powell, fue uno de los Bebop Boys de Gillespie, pero acabó entre rejas durante más de un año por delitos de narcóticos.

Al salir de la cárcel en 1949, dirigió varios conjuntos, se unió a Miles Davis y en 1963 publicó un álbum titulado "Stitt Plays Bird", que incluía diez piezas de Charlie Parker con Stitt acompañado por Jim Hall a la guitarra, John Lewis al piano, Richard Davis al bajo y Connie Kay a la batería. Stitt grabó discos con los saxofonistas Gene Ammons y Booker Ervin en los años 60 y era un habitual del Ronnie Scott Club de Londres. El alcoholismo fue atenuando poco a poco su producción, pero en 1972 los críticos dijeron que su álbum "Tune-Up!" demostraba que aún podía ofrecer solos excepcionales. Tocó con Art Blakey, Dizzy Gillespie, Thelonious Monk, Kai Winding y Al McKibbon en la agrupación Giants of Jazz y realizó giras con su colega Red Holloway. En 1982 sufrió un infarto y falleció a los 58 años.